En una entrevista concedida a Servimedia, el líder de la oposición confió en que "eso se va a arreglar", si bien reconoció que tanto la Comunidad como el Ayuntamiento de Madrid "tienen derecho a defender sus intereses".

"Creo que eso se va a arreglar y esto es el caso puntual de una caja y con una legislación que es la que es", insistió el presidente del PP.

El líder de la oposición recalcó que "lo primero y lo más urgente" es que la Comisión de Control se reúna a efectos de aprobar las cuentas del año pasado.

"Espero que se haga un esfuerzo, he pedido que se haga y tengo la seguridad de que en pocas fechas todo esto quedará resuelto", afirmó Rajoy.

En cuanto a las advertencias lanzadas la semana pasada por el gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, contra los partidos para que evitasen las injerencias políticas en las cajas, Rajoy reconoció que es partidario de reducir ese peso en estas entidades.

PESO POLÍTICO

"Soy partidario de que en las cajas el poder político disminuya y lo he dicho bastante antes de que se produjeran los acontecimientos de los que ahora se habla", insistió el presidente del PP.

"Soy partidario de que el peso político de las cajas desaparezca y estoy dispuesto a hablar de ese asunto", manifestó.

Pero, a su juicio, tiene que hacerse a través de una ley general "y estoy en ello", dijo, "pero entrar en detalles no es lo más útil a los efectos de darle una buena solución, que es lo que yo persigo".

Mariano Rajoy argumentó que ningún cliente de Caja Madrid, ni de "ninguna caja", debería tener "la más mínima preocupación" sobre la marcha de estas entidades.

"Quiero que el sistema financiero español sea un sistema solvente, que genere confianza, que dé créditos, y trabajaré para ello", concluyó el presidente del Partido Popular.