Rajoy aprovechó la primera reunión de la Junta Directiva Nacional del PP tras las vacaciones para lanzar un mensaje de optimismo ante las próximas citas con las urnas. "Podemos, debemos, tenemos y vamos a ganar las próximas elecciones generales", sentenció entre la ovación de los asistentes.

El líder de los populares presentó al PP como "la única alternativa al PSOE" y, tras el nombramiento de la periodista Cayetana Álvarez de Toledo como directora del gabinete de Ángel Acebes, defendió que está dispuesto a incorporar al partido a cualquier personas con ganas de "sumar". "Un triste o un resignado aquí tiene poco hueco", apostilló.

Rajoy aseveró que el PP no ha perdido "ningún apoyo" desde la derrota electoral de 2004, por lo que está "en condiciones de ganar" los siguientes comicios. A partir del último barómetro del CIS, que otorgaba al PSOE una ventaja de tres puntos en intención de voto con una participación del 80 por ciento, adujo que su partido ganaría si ésta no sobrepasara el 75 por ciento.

"Yo estoy aquí para ganar", remachó. Acto seguido hizo un llamamiento al resto de los dirigentes populares para que dediquen todos sus esfuerzos a ganar las próximas citas electorales: las catalanas del 1 de noviembre, las autonómicas y municipales de mayor de 2007 y las generales, previstas para 2008.

En su opinión, el PP "está muy bien" porque "no hay problemas internos" o "si los hay están muy localizados". Además, aseguró que las decisiones se toman "con independencia" y eso hace que coincida "a veces con unos, a veces con otros, a veces con muy pocos y a veces con muchos".

PRESENTACIÓN DE ALTERNATIVAS

El presidente del PP anunció la celebración durante los próximos meses de cuatro conferencias sobre inmigración, seguridad, economía y competencias del Estado en las que se plantearán alternativas al Gobierno de Zapatero y recabarán ideas para el programa de las elecciones generales.

Rajoy señaló que hubiera sido un "optimista contumaz" si nada más perder las elecciones en 2004 hubiese iniciado la presentación de su alternativa al Ejecutivo de Zapatero. "La alternativa hay que plantearla cuando hay que plantearla", recalcó.

Para él, la elaboración del programa electoral tiene "máxima importancia", dado que supone la presentación a los ciudadanos de un "proyecto común". Para ello, y con la intención de ganar los próximos comicios, aseguró que "hay que estar en la calle" y pidió "a todo el que no esté triste o resignado" que lo haga.

Manifestó que el PP cuenta con una "agenda amplísima" para llevar una alternativa de gobierno a los ciudadanos, aunque aclaró que seguirá haciendo oposición con un perfil distinto en cada caso, "según lo aconsejen las circunstancias".

"Seré crítico cuando tenga que serlo, seré muy crítico cuando tenga que serlo y cuando no tenga que serlo no lo seré; y cuando crea que tengo que pactar propuestas del Gobierno que son buenas para España lo haré. Yo ya sé que el nivel de exigencia con nuestro partido es mayor que con los demás, pero es este partido el que tiene que decir cómo se hace la oposición", explicó.

Rajoy justificó el tono de oposición especialmente duro durante los últimos meses dado que, a su juicio, el Gobierno estaba poniendo en cuestión el modelo de Estado con las reformas de los estatutos de autonomía.

De las cuatro conferencias planteadas por Rajoy, la primera será sobre inmigración y se celebrará el próximo mes de octubre. Las otras se centrarán en las debilidades de la economía, el incremento de la inseguridad ciudadana y la definición de las competencias de la administración del Estado.