Según Mariano Rajoy, la regulación que pretende hacer el Ejecutivo socialista es "muy lamentable" y en conscuencia el PP la enmendará en el Parlamento.

Por lo que se refiere a la huelga general del 27 de enero, afirmó que tras ella el Gobierno debe hacer un esfuerzo de entendimiento, porque "cuando a alguien se le da un toque de atención de esas características debe sentarse a dialogar, debe reflexionar y debe ver en qué se ha equivocado".

Rajoy se refirió también a la polémica abierta entre su partido y dirigentes de CiU, como Pujol y Roca, tras la petición del PP decrear en el Senado una comisión ue estudie los problemas de convivencia entre el catalán y el castellano.

Según el vicesecretario general del PP, "hay quien no parece estar por la tolerancia y por el respeto de los derechos de todos los ciudadanos". Refiriéndose a Miquel Roca, calificó de "exabruptos" sus críticas y dijo que "reparte certificados de democracia" y que cuando alguien no está de acuerdo con sus planteamientos "se excita mucho".