Rajoy asegura que el "lehendakari", Juan José Ibarretxe, tiene la obligación de acudir a defender su Plan porque, en caso contrario, tendrá que presentar su dimisión. "Yo espero al señor Ibarretxe el próximo día 1 en el Congreso de los Diputados y, si no, es un cobarde", indicó.

"Un señor que lleva dividiendo a los vascos durante años con su Plan, en el momento más importante, que es cuando se va a debatir ese Plan en el Congreso delante de toda la nación, no puede esconderse, porque si no tenemos que pensar que tiene miedo y que no es un dirigente político que está a la altura de las circunstancias", aseguró Rajoy.

El líder del PP sostiene, por otro lado, que si el Gobierno o el PSOE están hablando con ETA, tienen la obligación de decírselo al PP, como firmante del Pacto por las Libertades y Contra el Terrorismo.

Tras subrayar que ya son muchos los rumores y rectificaciones sobre conversaciones entre ETA, Batasuna y el PSOE, Rajoy ha advertido que su formación es "radicalmente contraria" al diálogo por considerarlo "un disparate y una inmoralidad".

Rajoy ha indicado que espera una aclaración del Gobierno sobre este tema. El PP, según ha explicado, sigue creyendo que ETA y Batasuna son organizaciones criminales -porque así lo han dicho los tribunales de justicia- y que el escenario no ha cambiado, porque el único cambio que puede suponer alguna modificación en la política antiterrorista es que ETA deje de matar y de existir.

"No se puede pagar ningún precio político porque ETA deje de matar y de existir, porque ni la vida ni los derechos ni las libertades de las personas son negociables", ha apuntado, al tiempo que ha advertido que el Gobierno se equivocaría si pensara que eso no es así.

Asimismo, Mariano Rajoy ha advertido que Gregorio Peces Barba, nombrado Alto Comisionado para las Víctimas del Terrorismo, hasta ahora lo único que ha creado es problemas, no ha aportado nada y no ha estado en su sitio en defensa de las víctimas del terrorismo. "Como a cualquier persona que asume una responsabilidad, hay que juzgarla por sus hechos y, en este momento, su nota es de suspenso", opina el dirigente popular.

"El no es quién para decir si hay que acercar o no a los presos de ETA, ni si hay que amnistiar a los que no hayan cometido delitos de sangre y me parece de una inoportunidad clamorosa", concluyó al respecto.