"Echamos en falta que haya un efecto preventivo y renovador. A la gente hay que enseñarla, hay que educarla, y eso no se ve por ninguna parte en esta nueva ley", subrayó Huidobro. "Pedimos un cambio de sentido en la gestión y en la política informativa de la Dirección General de Tráfico (DGT)".

Igualmente, el responsable del RACE mostró su descontento por la decisión de Tráfico de hacerse cargo de la gestión de los certificados de equivalencia o carnés de inmigrantes. "Hasta la fecha lo habíamos hecho nosotros y con bastante éxito: en un plazo de un mes y medio lo teníamos resuelto. Pero de la noche a la mañana la DGT ha decidido prescindir del RACE y ahora hay listas de espera de hasta cuatro o cinco meses", dijo.

Agregó que el hecho de que este cometido no corresponda ya al RACE implica la desaparición de "un equipo de profesionales magníficos que, en colaboración permanente con los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, desarticulaban bandas perfectamente organizadas expertas en la falsificación de carnés de conducir".

A juicio de Huidobro, "al nuevo equipo de la DGT no le termina de gustar todo lo que tiene que ver con el RACE. Parece que tiene que prevalecer lo que tenga de apellido 'Cataluña', y el efecto catalanizador no nos gusta porque no es bueno".