Según un estudio realizado por el RACC, este es el accesorio para el vehículo más peligroso. También se han analizado otros objetos, como manos libres para los móviles, que recomiendan situarlo por encima de las rodillas, y navegadores de GPS portátiles, cuyo sistema de sujeción por ventosa no supone ningún peligro para los ocupantes del vehículo.

En este estudio, el RACC recuerda las recomendaciones clásicas de seguridad, como no llevar objetos sueltos en el vehículo o no interferir la salida de los airbags para evitar que los accesorios salgan proyectados contra los pasajeros en caso de accidente.