Lo que está ocurriendo en Caja Madrid es "el intervencionismo público más descarado que yo recuerdo" y "lo calificaría de esperpéntico", dijo el pasado martes Quintás.

Estas declaraciones hicieron que el consejero de Economía y Hacienda de Madrid, Antonio Beteta, acusara a Quintás de actuar como un "lobbysta" en defensa de los intereses de los ejecutivos que le pagan y que pidiera al presidente de la CECA una rectificación al respecto.

Hoy Quintás se ratificó. "Mis palabras ya saben cuáles son, las pueden consultar en la Red. Esas son las que he dicho y es lo que sigo pensando", aseveró en declaraciones a los medios antes de inaugurar una conferencia sobre educación financiera.