La nueva estrategia se centrará en acciones más concretas para cada país y en evaluar los factores que provocan las oleadas de inmigrantes en Europa, sobre todo desde y hacia deterinados países, como es el caso de España y Francia.

Hasta ahora, los ministros de Interior habían sido acusados de expulsar sistemáticamente del país a los inmigrantes "ilegales" detenidos antes de querer ahondar en las causas de este fenómeno cada vez más frecuente.

Los nuevos planes son el resultado de seis meses de trabajo del grupo de alto nivel sobre Asilo y Migración del Consejo de Ministros, centrados en cinco países con un fuerte índice de emigración, Albania, Afganistán, Marruecos, Somala y Sri Lanka.

En cuanto al caso de Marruecos, que afecta sobre todo a España y a Francia, el plan de acción, elaborado con la colaboración de las autoridades marroquíes, apunta como causas del aumento de los inmigrantes procedentes de este país, a pesar de las restricciones europeas, el crecimiento de la población, el elevado índice de desempleo, el estancamiento del crecimiento económico y la imagen de la rica Europa.

Como medidas para combatir el flujo de inmigrantes "ilegales", el nuevo plan e acción recomienda antes combatir las redes de tráfico, promocionar el regreso voluntario de los inmigrantes e instar al Gobierno marroquí a que exija visados de tránsito a ciudadanos de terceros países que atraviesen Marruecos.