Pujol, que se entrevistó en Madrid con Ruiz Gallardón, tuvo que soportar un 'chaparrón' de insultos e imprecaciones proferidos por unas doscientas personas que le esperaba a su llegada a la sede del Gobierno regional, en la Puerta del Sol.

Los manifestantes dirigieron a Pujol gritos de "fuera" e insultos como "chorizo" y "corrupto", durante el tiempo en que el presidente catalán descendía del vehículo y penetraba en la sede del Gobierno de Madrid.

Pujol y Ruiz Gallardón ofrecieron posteriormente una rueda de prensa en la que ambos expresaron su deseo de estrechar lazos de cooperación entre ambas comunidades autónomas, que según el primero de ellos tienen problemascomunes y visiones políticas parecidas.

El mandatario catalán restó importancia a los insultos recibidos y se mostró convencido de que no se trataba de una venganza por los incidentes ocurridos en la Diada del 11 de setiembre, cuando líderes del PP catalán fueron agredidos con huevos y otros objetos por nacionalistas exaltados.

Pujol expresó su confianza en que el Gobierno central se dará cuenta de que sería "muy negativo" bloquear la cesión del IRPF a las autonomías y se mostró confiado en que eta cuestión se resolverá de manera satisfactoria.

Respecto a su entrevista con Ruiz Gallardón, dijo que espera que dentro del PP haya personas como el presidente madrileño, que vean la realidad de las cosas cuando analizan la situación de Cataluña.

Pujol no quiso pronunciarse sobre si CiU apoyará la creación de una comisión parlamentaria sobre los GAL y dijo que la coalición debatirá sobre este particular el próximo lunes.