Pujol, que hoy ofreció en la Universidad d Alcalá una conferencia sobre "globalizacion e identidad", reconoció que ese tipo de actitudes son potencialmente "peligrosas para nosotros".

Por ello, recordó que el de CiU es un nacionalismo "pacífico, dialogante y que ha hecho una importante contribución a la consolidación de la democracia y al progreso general de España" e insistió en que a veces tiene "miedo de que esto no sea debidamente considerado".

El dirigente catalán se abstuvo de calificar el estado actual de relaciones con el PP y elGobierno central y se limitó a indicar que "el Partido Popular ejerce su mayoría absoluta", mientras que CiU intenta siempre negociar, con desiguales resultados.

En este sentido, manifestó sus esperanzas de que la negociación que acaba de comenzar para acordar un nuevo sistema de financiación de las comunidades autónomas, acabe "bien" para Cataluña.

El primer consejero de la Generalitat, Artur Más, reconoció que con una mayoría absoluta del PP, Cataluña no podrá "conseguir sus aspiraciones máxima", aunque confió en que la propuesta "moderna" de financiación que hace su gobierno encuentre eco en el Ejecutivo del PP. Su previsión es que la negociación este cerrada, a más tardar, en el mes de julio.

En cuanto a la aplicación de la sentencia de la Audiencia Nacional que anula la congelación salarial para los funcionarios en 1997, Pujol aseguró que, en caso de hacerse firme, sólo obliga a la Administración central, aunque las autonómicas estarían obligadas "politicamente".

En relación al PlanHidrológico Nacional, reiteró la defensa de un trasvase desde el Ródano francés y se preguntó: "si traemos gas de Argelia y de Siberia con miles y miles de gasoductos, ¿por qué no podemos traer agua de tan sólo 300 kilometros?", para así aliviar la presión sobre Aragón y la cuenca del Ebro.