Pujol fue claro a la hora de definir el objetivo principal de CDC para el futuro: "quereos una autonomía real. Poder real en competencias estatales. Competencias exclusivas, como dice el Estatuto, en definitiva, que nos corresponda la última palabra, porque ahora eso está desvirtuado".

El presidente de la Generalitat dijo que lo de menos es como se defina este proyecto político porque "sin duda lo que queremos es más poder político, más capacidad de decisión y tener la última palabra".

A su juicio, el Estatuto de Autonomía que permite el marco constitucional reconoce "un alto grado e poder político de competencia exclusiva, de autonomía integral, de soberanía", y todo ello sin una modificación del marco legal actualmente vigente.

En este terreno, Pujol recordó que la doctrina del Tribunal Constitucional respalda estos planteamientos, puesto que la Carta Magna permite un desarrollo autonómico no restrictivo.

En la apertura del XI Congreso de CDC, Pujol hizo un balance positivo del papel realizado por esta formación política en el desarrollo de Cataluña y del impulso dado al aís. Reconoció, no obstante, que hay sectores de la sociedad catalana que demuestran "insatisfacción" ante la imposibilidad de alcanzar rápidamente el objetivo de autogobierno pleno.

Advirtió, en este sentido, que aunque hay un largo camino ya reconocido, lo que queda "será difícil, será como un valle estrecho y oscuro, con una bajada complicada. Los que hacen montaña saben que las bajadas siempre son más difíciles que las subidas".

El segundo objetivo que describió como fundamental para el futur del nacionalismo catalán es el de la financiación. En este terreno, reprochó a los que son escépticos ante la negociación con el PP que la "alianza circunstancial" que ha tenido que suscribir CiU en los últimos años "no define un partido", ya que lo sustancial para una formación política es "su proyecto y su objetivo".

Insistió en que "si alguna mejora política y financiera se puede conseguir aquí y ahora es negociando con el Gobierno central". Aconsejó hacerlo "sin complejos", y preparar la embarcacón para el momento en que "los vientos sean favorables".

Pujol aseguró que CDC "no reclama la independencia", pero admitió que en sus filas hay personas que "de corazón" son independentistas, al igual que hay partidos españoles "a los que les gustaría que Cataluña como personalidad diferenciada no existiera".

Pidió a los 1.881 compromisarios asistentes al Congreso que se concentrarán en la consecución de objetivos reales porque aquellos otros que son inasequibles conducen a la frustración e impedrán alcanzar los objetivos ambiciosos por los que debe trabajar CDC en los primeros años del siglo XXI.

MENSAJE A LOS SUYOS

En clave interna, el presidente de CDC se declaró optimista respecto al futuro, aunque indicó que hay cosas dentro del partido que le disgustan y, en concreto, citó la "pusilanimidad de alguna gente nuestra, la falta de fe, las dudas de algunos", frente a lo cual reclamó trabajo y perseverancia en los objetivos.

Indicó que sólo puede hacer fracasar el proyecto de CDC la fata de visión nacional, el abandono de las reivindicaciones históricas del partido, la supeditación de la política catalana a otros intereses y, muy especialmente, la desorientación en el rumbo tomado y la caida en "personalismos, juegos de poder, alegrías irreflexivas y frivolidad, como han caido muchos otros partidos antes".

Se refirió, por otra parte, a la relaciones entre CDC y su socio de gobierno en la Generalitat, Unió Democrática, para señalar que "todos sabemos cuál sería la mejor solución", e alusión a una posible fusión entre las dos formaciones.

Finalmente, Pujol tuvo palabras de agradecimiento para Pere Esteve, el hasta ahora secretario general de CDC, que abandona el cargo en este congreso. Elogió su temple "para no abandonar el timón con mar gruesa" y por haber contribuido especialmente al desarrollo del partido, por lo que merece su respeto y agradecimiento.

Entre los invitados al Congreso figuran el primer secretario del Partido de los Socialistas de Cataluña, Josep Montilla; l portavoz del PNV en el Congreso, Iñaki Anasagasti, y otros dirigentes peneuvistas; el presidente de Iniciativa, Rafael Ribó; el secretario general de Eusko Alkartasuna, Gorka Knörr; el secretario general de Esquerra Republicana, Josep LLuis Carod Rovira; y representantes de otros partidos nacionalistas y regionalistas. Ningún dirigente del PP ha sido invitado.