Así lo indicó Puigdemont en sus redes sociales, donde señaló que el 9 de noviembre de hace 10 años “fue una respuesta contundente a décadas de desprecio a la voluntad democrática del pueblo catalán”. “Como es tradición, lo sabe todo el mundo y es profecía, España no escuchó y respondió con la represión”, deploró.

Sin embargo, destacó que las “costuras” de España “están rotas desde entonces”, como lo demuestra el hecho de que “en 10 años no solo no ha reparado el error histórico que cometieron con el Estatuto, sino que se han encargado de demostrar que no tienen ninguna propuesta para el futuro de nuestro país que no sea quedarnos en aquello que eufemísticamente llaman ‘normalidad’ por no tener que decir: ‘es lo que hay y aún gracias’”.

Por su parte, el secretario general de Junts, Jordi Turull, comentó que “más de dos millones de personas votamos” el 9-N de hace 10 años y fue “el primer paso para iniciar un camino sin retorno, el camino hacia la independencia de Cataluña”. “Si persistimos con determinación y autoexigencia y buscando más complicidades que reproches, lo conseguiremos seguro”, dijo.

Además, el presidente del Parlament de Cataluña, Josep Rull, manifestó que el 9-N de 2014 fue “la primera gran victoria que generó una ola de esperanza colectivo en torno al derecho a decidir y al derecho a la autodeterminación”. “Gracias a aquel 9-N fue posible el 1 de octubre”, recordó refiriéndose al referéndum del 2017.