Redondo, que declaró durante tres horas esta tarde en la Audiencia Nacional y que continuará prestando declaración mañana, aseguró que ignoraba el acuerdo del sindicato con la gestora IGS y que todo era competencia de Sebastián Reyna, que quedó en libertad sin cargos la pasada semana tras declarar durante día y medio ante el juez Moreiras.

A su salida de la udiencia Nacional, Pedro Poveda, abogado de la promoción de El Espinillo, aseguró que el proceso judicial no se ha paralizado a pesar de la querella interpuesta por el abogado Francisco Méndez Goas el pasado 15 de junio, en la que incluía a un aforado, el vicepresidente de la Asamblea de Madrid, Javier Ledesma, como inculpado.

Poveda manifestó que no se sentía satisfecho por la declaración de Redondo, que calificó de "anodina". A su juicio el ex secretario general de UGT "emplea la táctica de escudars mucho en las competencias de cada uno de los miembros del sindicato, y se ha hecho ver que todo el tema de finanzas era cuestión de Reyna y que él no tenía ningún tipo de intervención".

Respecto a si recibía información periódica de los movimientos económicos de las promociones, Redondo lo negó y reiteró que no tenía información porque no era de su competencia, según el abogado de El Espinillo.

TRIBUNAL SUPREMO

El juez Moreiras determinará en el plazo de diez días la solución a la querella queafecta al aforado Javier Ledesma, plazo en el que los abogados podrán presentar las alegaciones que estimen oportunas. Poveda precisó que el abogado del Plan 18.000, Méndez Goas, piensa retirar de la querella al aforado.

Respecto a la inhibición de Moreiras por este asunto, Poveda manifestó que "es muy difícil", aunque no descartó que pudiese ocurrir. Si así fuese, la competencia del proceso judicial podría pasar al Tribunal Supremo o al Tribunal Superior de Justicia de Madrid.

En este sentido, Pveda manifestó que "cuando hay una persona aforada, declaran todas las no aforadas, y la persona aforada pasa para la Sala Segunda del Tribunal Supremo".

Nicolás Redondo abandonó la Audiencia Nacional en coche, acompañado por el actual secretario general de UGT, Cándido Méndez, y arropado por los gritos de cientos de simpatizantes de la central.

Durante toda la comparecencia de Redondo, los sindicalistas y los cooperativistas se enfrentaron verbalmente separados por la policía. Cuando los afectads por la crisis de PSV coreaban "Nunca se vio sindicato tan ladrón", los ugetistas contestaban agitando la mano y diciendo: "Poneros en fila, que os vamos a pagar".