Estas cantidades podrían alcanzar los 400 millones de pesetas, según la cadena Ser. La reclamación de Sotos corresponde al valor del 57% de IGS, porcentaje que el hoy encarcelado tenía en dicha compañía, a través de la sociedad IES (Iniciativa de Economía Social).

Turiel negó que la reclamación de Carlos Sotos tenga que ver con una cláusula de blindaj de su contrato y aseguró que el antiguo gestor de PSV, ahora en prisión, "no cobró ni un duro de indemnización porque se lo negó la intervención judicial".

No obstante, según fuentes jurídicas, el equipo defensor de Sotos, encabezado por Miguel Bajo, ha cobrado un tercio de sus honorarios del sindicato y se le adeuda el resto. La cantidad recibida podría rondar los seis millones de pesetas. Esto avalaría la tesis de que Sotos consiguió algún tipo de contraprestación, ratificada por escrito, al abandoar su cargo en PSV.

Marino Turiel indicó que "Carlos Sotos está muy enfadado con UGT" y explicó que el ex gerente de PSV no poseía más patrimonio que la inversión que había realizado en IES, por lo que ahora le falta solvencia para poder mantener a su familia.

El abogado, que sigue el caso PSV desde el principio, cree que la cantidad reclamada por Sotos es muy inferior a los 400 millones de pesetas que se está barajando.