En declaraciones a la Cadena Ser, Yáñez dijo, al ser preguntado por la posibilidad de que el secretario general dimita: "si Joaquín Almunia dimite, los Estatutos dicen que inmediatamente se tiene que covocar un Congreso Extraordinario. Y en ese caso, insisto, que no desea el candidato, en ese caso, si se produce, Borrell sería candidato a la secretaría general, sí, desde luego".

Yáñez aseguró que no tienen razón quienes acusan a la Oficina del Candidato de hacer una labor paralela a la dirección que distorsiona la imagen del PSOE ante la opinión pública.

Sobre ese particular, dijo que si la disolución de la oficina ayudara a solucionar el conflicto, "disuelta está. Si fuera ese el problema, la olución sería facilísima. Yo creo que se ha exagerado la importancia de la Oficina del Candidato, que es un grupo de voluntarios, muy pequeño, que se creó de urgencia y por cierto aprobado por el Comité Federal del partido, por lo tanto es una unidad del partido, y que se creó para la asistencia inmediata, colaboración y ayuda a la tarea y la agenda del candidato".

Explicó que, lógicamente, la disolución de la Oficina implicaría que el candidato tendría que instalarse en la sede central del PSOE, con edios humanos y materiales suficientes, y contando con el respaldo de "toda la Ejecutiva y toda la maquinaria del partido".

Respecto al papel de Felipe González en el conflicto entre el candidato y el secretario general, aseguró que es el propio de una persona de prestigio cuya opinión se respeta, "pero no es que haya hecho ninguna mediación, ni haya provocado reuniones de Almunia y Borrell, por ejemplo".