Se trataría, por tanto, de intentar moderar el impacto de posibles subidas de tipos de interés en la economía de las familias españolas, más endeudadas que nunca, o bien para un periodo económico de vacas flacas menos boyante que el actual.

Los socialistas argumentan que el mercado hipotecario "es probablemente el segmento con mayor influencia en la estabilidad macroeconómica y financiera", ya que de su funcionamiento depende la financiación de la vivienda, que representa dos tercios de la riqueza total de los hogares españoles.

La actual "fase expansiva" de la economía española y los menores tipos de interes han estimulado la demanda de este tipo de préstamos, un incremento al que el mercado ha respondido con "gran flexibilidad", lo que no impide que sea necesaria una reforma para fortalecerlo y modernizarlo.

"En los últimos años han cambiado algunos factores fundamentales", prosigue, y la satisfacción por los beneficios económicos de este periodo de expansión "no debe retrasar el diseño de mecanismos necesarios para la adaptación a otras fases menos favorables del ciclo económico".

Por ello, emplaza al Ejecutivo a flexibilizar y modernizar el régimen jurídico de este mercado con el objeto de favorecer la accesibilidad a todos los ciuadanos, mejorar la eficiencia en la asignación de recursos, asegurar la protección de los prestatarios y garantizar la estabilidad económica.