El portavoz socialista en la Casa de la Villa, Juan Barranco, acompañado por varios concejales de su grupo y miembros de la Federación Socialista Madrileña (FSM) y de las Juventudes Socialistas de Madrid, desplegaron una pancarta en un inmueble situado en la Gran Vía de San Francisco, para advertir que allí hay suelo disponible para edificar de forma inminente casas de protección oficial.

Durante la arde y la noche de ayer fueron colocadas más de veinte pancartas similares, en una campaña con la que el PSOE quiere llamar la atención de los responsables municipales, para explicarles que en Madrid hay suelo suficiente para construir las viviendas sociales que reclaman los vecinos.

Según Barranco, el PP no tiene como objetivo prioritario construir pisos para las familias modestas, con salarios muy bajos (entre 80.000 y 90.000 pesetas).

Sin embargo, sí se preocupa por atender a las capas de poblción que tienen ingresos que representan 5,5 veces el salario mínimo interprofesional.

En el caso concreto del solar de la calle Gran Vía de San Francisco, el concejal socialista señaló que el propietario es la Empresa Municipal de la Vivienda (EMV), que desde hace varios años tiene incluso un proyecto de ejecución.

En el terreno, situado muy cerca de la puerta de Toledo, pueden ser edificadas un total de 260 viviendas, aunque el Ayuntamiento entiende que la cifra real es de un centenar, según uncomunicado hecho público ayer.

"Aquí hay suelo suficiente para 260 viviendas y la EMV tiene el proyecto ultimado desde hace varios años. Sin embargo, el solar está hecho un erial, lleno de escombros", explicó Barranco.

El ex alcalde recordó que el pasado mes de septiembre el grupo socialista presentó un documento sobre un programa de suelo y vivienda en Madrid, que planteaba la construcción de 90.656 viviendas, 4.000 de ellas para jóvenes.

Barranco dijo que, frente a estas propuestas, el equpo de gobierno municipal siempre recurre a la excusa de que no hay suelo y, por el contrario, apuesta por recalificar suelo rústico para favorecer a los especuladores.