Según informó hoy a Servimedia el presidente del comité de empresa de la central, Alberto César González, los responsables socialistas quisieron transmitir a los trabajadores "tranquilidad" ante la posibilidad de que el Gobierno se decida finalmente a cerrar Garoña.

El presidente del comité indicó que desde el PSOE se pidió tranquilidad porque "nadie se iba a quedar en la calle" pues aunque sea muy complicado se tratará de buscar alternativaspara los trabajadores en el caso de que no se prorrogara la vida de la central.

Granado y Simón de la Torre no adelantaron a los trabajadores cuál es la decisión del Gobierno ni cuando se comunicará la misma.

Por su parte, el comité de empresa dejó claro que "no quieren hablar de alternativas de trabajo" y que lucharán por mantener los empleos de la central.

Además, "Garoña no está sola. La lucha no va a ser sólo de Garoña, va a ser de todas las centrales nucleares porque si cae una, irán cayendo las demás", señaló Alberto César González.

Por otro lado, los trabajadores de la central siguen esperando que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y el ministro de Industria, Turismo y Comercio, Miguel Sebastián, accedan a reunirse con ellos para conocer su punto de vista sobre el posible cierre de Garoña, petición que les transmitieron a través de una carta de la que no han obtenido respuesta.

La central de Garoña cuenta con algo más de 700 trabajadores. Además, genera alrededor de otros 300 empleos indirectos. La mayoría de la plantilla reside en Miranda de Ebro y en Medina de Pomar.