Una normativa que recoge la Constitución Española de 1978 y el proyecto de Ley Orgánica de la Educación, algo que está"siendo aplicado en la inmensa mayoría de los países europeos", según la enmienda.

La reacción del Partido Popular en contra de incluir en los programas escolares esta asignatura es una "actitud irresponsable que apoya y anima a utilizar métodos ilegales como es la objeción de conciencia, porque proponen un rechazo basado en el incumplimiento de una norma democráticamente elaborada y aprobada, incluso sin objeciones por parte del Consejo de Estado", se señala en el texto.

"Sin ir más lejos", recuerda la enmienda,"el propio Consejo Escolar del Estado acaba de aprobar un dictamen donde insta a las Administraciones Educativas a desechar la objeción de la asignatura en sus territorios".

Esta iniciativa argumenta la importancia de esta asignatura en la idea de que la cultura democrática "no es inherente a la naturaleza humana, hay que construirla y transmitirla en la familia, en los centros educativos y en la comunidad".

"La educación no puede únicamente aleccionar a través de conceptos los valores democráticos. Debe saber transmitirlos, enseñarlos en la práctica y responder también a la pregunta: vivir juntos ¿con qué finalidad? ¿para hacer qué?", aclara la propuesta.

Además la enmienda señala que "el desarrollo de un comportamiento cívico responsable puede y debe fomentarse desde una edad muy temprana", ya que esta materia "está considerada como instrumento para que niños y jóvenes se conviertan en ciudadanos responsables y activos".