Tras la negativa del PP e IU a apoyar otros cinco años de mandato de Gil Robles, el PSOE ha ofrecido el cargo a destacadas personalidades que no desagraden al PP, entre los que destaca el catedrático de Derecho Administrativo y ex magistrado del Tribual Constitucional, Jesús Leguina, y el ex presidente del Gobierno, Adolfo Suárez.

Otros nombres tienen menos posibilidades de lograr el apoyo de los conservadores, como son los de Juan Alberto belloch, vocal del Consejo general del Poder Judicial, y miembros de la asociación "Jueces para la Democracia", o el de Francisca Sauquillo.

El nombre de Suárez circula insistentemente dentro de la institución de Defensor del Pueblo como uno de los nombres que menos recelos despierta en el PP, partido al qu, en la práctica, beneficia que la vacante de Gil Robles no sea cubierta a tiempo.

Si así sucediera, el cargo debería ser asumido de forma provisional por su adjunta primera, Margarita Retuerto, que en su día fue elegida a propuesta del PP, junto a Gil Robles, que lo fue a propuesta del PSOE.

Otra de las hipótesis que circula dentro de la Oficina del Defensor del Pueblo es que PSOE y PP pacten que Retuerto ocupe el cargo de forma provisional hasta las elecciones para, después, con la nueva correlción de fuerzas parlamentarias, elegir al Defensor del Pueblo.