En declaraciones a Servimedia, Redondo señaló que "de este 34 Congreso no han salido ganadores. Hemos perdido todos porque no ha valido para una profunda renovción del partido. Mi impresión no es optimista. Sólo ha habido una fuerte lucha, muchas tensiones por los cargos en la Ejecutiva y nada para la autocrítica".

"Este Congreso ha sido el de la ausencia de capacidad crítica, lamentablemente. Uno de los mayores pecados que tiene este partido es que nadie ha querido participar, oponerse, confrotar, dar ideas, sugerencias, alternativas... y además, el problema que Felipe tenía con los 'barones' no se ha solucionado", añadió.

Para Redondo, el PSOE ha obvado en este Congreso "la autocrítica de los errores que se cometieron durante los 13 años de Gobierno en política económica y social, y además se asumieron conceptos conservadores que no eran nuestros".

Sobre el nuevo secretario general del PSOE, opinó que es "profundamente felipista" y apuntó que ahora "nos encontramos con un 'felipismo' sin Felipe, más de lo mismo. Está por ver si después, en este cargo, va a cambiar o no".

Nicolás Redondo mostró también su desilusión por la reducción tan liger aplicada en el número de miembros de la Ejecutiva (de 35 a 33) "cuando todos esperábamos al comienzo de este Congreso que finalmente iba a salir una dirección ágil y operativa, pero de eso nada de nada".

En su opinión, la Ejecutiva debería ser, como propuso el mismo Felipe González, un órgano más reducido, para que "no fuera retórico el sacrificio por el trabajo del partido, sino con plena dedicación".