Esta es la idea ue transmitió el propio Maragall a los medios de comunicación en la sede federal del PSOE, donde él y el primer secretario de los socialistas catalanes, Narcís Serra, se reunieron con Almunia.

Los socialistas han dejado entrever su deseo de aprovechar en la campaña electoral de las generales el tirón de Pasqual Maragall, que consideran acreditado tras el resultado de las últimas catalanas, en las que rozó la victoria.

El propio Maragall explicó que su intención es "sumar fuerzas" para que Almuniallegue a La Moncloa, y declinó valorar las posibilidades de pacto que se abrirían si el PSOE consigue gobernar en minoría. De esta forma, evitó pronunciarse sobre la advertencia que él mismo lanzó hace unas semanas, en el sentido de que no sacrificaría el proyecto de Cataluña en beneficio de un pacto de Gobierno central.

Maragall se limitó a reiterar la necesidad de un cambio de Gobierno para terminar con la situación actual de España, y también de Cataluña, en la que, desde su punto de vista, "predomna el tacticismo y el intercambio de favores más que una estrategia sólida por parte de la mayoría que nos gobierna".

En cuanto a las negociaciones que encabeza Serra para concurrir junto a otras fuerzas de la izquierda catalana al Senado, Maragall expresó su confianza en que fructifiquen y recordó que esta experiencia y se ensayó en las primeras elecciones con un resultado "rotundo".