"No tengo ningún inconveniente, para mí todos los compañeros son iguales y Alfonso Guerra, sin duda, es un compañero relevante de este partido, eso nadie lo pone en duda", afirmó.

Leguina cree que este Congreso no supondrá "el fin del guerrismo, sino que debe servir para certificar el fin de la renovación y que a partir de ahora ya no se hable más de renovadores y no renovadores, sino quela renovación sea un hecho para todos los miembros del partido".

A su juicio, "el pasado es único y el futuro es plural, así que a partir de ahora hay que mirar hacia el futuro".

El presidente madrileño reconoció que "al final este será un Congreso de las personas, porque el acto final es la votación de la Ejecutiva y eso lo componen personas con carnet de identidad, apellidos, cara, ojos,etcétera".

En su opinión "detras de las personas también estás las ideas" y en este Congreso se tendrá qe dilucidar la función de la izquierda "que en este final de siglo tiene que marcar cuales son los caminos". Para dilucidar esta cuestión "unos están más en eliminar la retórica y otros se agarrán a la vieja retórica", dijo en alusión directa a los guerristas.