Así lo reiteró en rueda de prensa el que será portavoz del PSOE en el Congreso de los Diputados, Alfredo Pérez Rubalcaba, después de la firma del acuerdo por el que se ceden a las minorías puestos en las mesas del Parlamento pero se garantiza la estabilidad del Parlamento.

Pérez Rubalcaba agradeció a todos los firmantes su contribución al acuerdo y subrayó que ha sdo posible gracias al esfuerzo del PSOE para reflejar la pluralidad del Parlamento en sus órganos de funcionamiento interno, que ha sido debidamente correspondido.

El portavoz aseguró que el acuerdo fue firmado por todos los grupos tanto del Congreso como del Senado a los que había sido propuesto, "todos menos el PP", a pesar de que discrepancias entre socialistas catalanes y Esquerra Republicana de Cataluña impidieron que Entesa Catalana de Progrés rubricara el texto, quedando pendiente de negociacioes posteriores que ambas partes confían en cerrar.

Los socialistas no quieren quitar "un ápice de trascedencia" a este acuerdo, y el portavoz socialista resaltó, por ello, que el acuerdo va "mucho más allá" de un mero acto formal de reparto de puestos en las mesas del Congreso y del Senado.

El acuerdo refleja, explicó, la clara voluntad política del PSOE de guiar todas sus decisiones por el diálogo, el consenso, y el respeto al adversario, y por potenciar el Parlamento como centro de la vida políica.

Jesús Caldera, que se despidió públicamente como portavoz socialista antes de dejar su puesto formalmente en manos de Pérez Rubalcaba, destacó también que el acuerdo es fruto de la interpretación que da el PSOE al mandato de las urnas para un Gobierno sólido, firme, estable, pero también dialogante.

Tanto el PSOE como los demás portavoces que comparecieron en rueda de prensa lamentaron la "autoexclusión" del PP de este acuerdo y expresaron su confianza en que este acto formal sea realmente e inicio de una legislatura marcada por el diálogo.

Así lo afirmó el portavoz de CiU, Josep Antoni Duran Lleida, y también el del PNV, Josu Erkoreka, especialmente duro con el PP. Recordó que este partido prometió una oposición "patriótica" pero en realidad comienza con términos "sectarios, excluyentes, egoístas", y con incapacidad de llegar a acuerdos.

También Gaspar Llamazares expresó en nombre de Izquierda Unida su convicción de que este acuerdo es "un punto de inflexión" en la regeneración demcrática y la reposición del Parlamento como centro de la vida política.

José Antonio Labordeta, diputado de la Chunta Aragonesista, aseguró que comienza bien lo que será una legislatura "viva" aunque complicada. "La vida parlamentaria con Franco era muy fácil y estos últimos cuatro años también, pero es más hermoso cuando existen estas complicaciones", apuntó.