Según Santín, el Área de Medio Ambiente paga a FCC (Fomento de Construcciones y Contratas) 2.330.000 euros anuales (el 1,5% de lo que cobra por recoger la basura) para los gastos de difusión de la recogida selectiva en origen y campañas de publicidad y concienciación ciudadana en temas relativos a la gestión de residuos en la ciudad de Madrid.

Santín explica a través de una nota que hasta hace unas semanas las campañas de recogida de muebles viejos y la selectiva de envases las hacía FCC, que figuraba directamente en los folletos informativos de los días y horas de la recogida de muebles y en los de los materiales a depositar en el contenedor amarillo.

Sin embargo, según el PSOE, ahora la Concejalía de Medio Ambiente, que dirige Ana Botella, ha cambiado el sistema, sustituyendo en los folletos a la empresa por el logotipo del Ayuntamiento "Madrid" e incluyendo el slogan "Madrid Funciona".

Para Santín, esto es "ilegal y fraudulento", ya que "el Gobierno municipal está gastando más de dos millones de euros anuales para reemplazar en los folletos la información por la propaganda: la cuestión ya no es indicar al ciudadano qué muebles puede bajar a su portal para ser recogidos y cuáles no, sino trasmitirle el slogan 'Madrid Funciona'".

Además, el Grupo Municipal Socialista critica que el Ayuntamiento vaya a gastar 536.516 euros en contratar un servicio de información y sensibilización de apoyo a las actuaciones programadas de limpieza integral en los distritos (Aplis), dirigido a dar a conocer al ciudadano las actividades de limpieza que se van a realizar en los barrios mediante el buzoneo de cartas y dípticos informativos y pegado de carteles en los portales.

A juicio de Santín, "ese derroche en publicidad no tiene otra justificación que el autobombo, pues esas tareas de concienciación e información ciudadana en materia de limpieza ya están incluidas entre las obligaciones de las empresas encargadas de la limpieza viaria y que ya paga el Ayuntamiento con el canon anual."

Para Santín, las Aplis son "otro caso de la descarada propaganda política disfrazada de información institucional que está poniendo en marcha la señora Botella. Se trata de anunciar trabajos de limpieza extraordinarios que no lo son, pues todos ellos están tasados en los pliegos de condiciones de los contratos de las empresas encargadas de la limpieza como tareas ordinarias que hay que hacer de forma normal y con una frecuencia establecida, y no de una forma extraordinaria", asegura.