En un comunicado, Valentín pidió a los dirigentes del PP que "rectifiquen de una vez por todas y que pidan disculpas a los familiares de los enfermos y a los profesionales por haber generado una situación de desconfianza en el conjunto de la sanidad pública".

Por otra parte, la dirigente socialista aseguró que el informe elaborado por el colegio médico de Madrid sobre el Hospital Severo Ochoa es "injusto, parcial y tendencioso" y lamentó "que haya provocado la dimisión, precisamente, del presidente de la Comisión de Ética de dicho Colegio", Miguel Casares.

Además, Valentín resaltó que el consejero de Sanidad madrileño "mintió cuando repetidamente habló de 400 homicidios", ya que "existen numerosos informes, además del elaborado por el Colegio Médico de Madrid, que demuestran que no hay ninguna relación entre la muerte de los pacientes y la sedación".

En ese sentido, la secretaria de Bienestar del PSOE consideró que "el nuevo informe demuestra a las claras que el consejero Lamela ha mentido una y otra vez".

"Con esa forma de actuar", añadió, "lo único que ha conseguido Lamela ha sido sembrar la alarma social y el consiguiente aumento del sufrimiento de muchos pacientes terminales, ante el posible retraimiento de los médicos cuando los familiares solicitan una sedación".

Por todo ello, la portavoz de Sanidad de la Ejecutiva Federal del PSOE recordó que, en muchos casos, la sedación es la única herramienta que queda para evitar el sufrimiento a enfermos terminales y subrayó que esta práctica está recogida en el código deontológico de los profesionales de la medicina.