Pérez Rubalcaba animó al PP en rueda de prensa a presentar ese recurso, y cuando supo que el portavoz popular, Eduardo Zaplana, había anunciado su presentación minutos antes, aseguró que el PSOE lo celebra.

El portavoz socialista expuso su convicción de que el trámite decidido por la mayoría de la Mesa y de la Junta de Portavoces es plenamente acorde con la iniciativa, una reforma estatutaria, que no esconde, como pretende el PP, una modificación encubierta de la Constitución.

Aseguró, además, que los horarios establecidos para ese debate pretenden únicamente "acabar un poco antes por la noche" y que la votación sobre la toma en consideración de la iniciativa sea a una hora prudente.

La Junta de Portavoces decidió, pese a la posición contraria del PP, que el debate de totalidad de la propuesta de reforma estatutaria comience a la una de la tarde del miércoles 2 de noviembre con la intervención de los representantes del Parlamento catalán.

A las cuatro de la tarde se reanudará el debate con las demás intervenciones. Pérez Rubalcaba recordó que los plenos "importantes" se adptan a ese horario, como es el caso del de Presupuestos que se celebra esta semana.

Sin embargo, Zaplana argumentó que se rompe un precedente en los debates de iniciativas de parlamentos autónomicos al introducir una suspensión de la sesión entre la exposición de los proponentes y las intervenciones de los demás.

Pérez Rubacalba dio por hecho que el Gobierno intervendrá en ese debate. Aunque es potestad del Ejecutivo decidir si interviene o no, y en qué momento lo hace y con qué portavoz, el socialista dijo que serán el propio presidente o la vicepresidenta quienes expresen la posición del Gobierno.

No obstante, el secretario de Organización del PSOE, José Blanco, dijo recientemente en rueda de prensa que la posición del partido y del Gobierno quedaría expuesta en ese debate por alfredo Pérez Rubalcaba y por el propio José Luis Rodríguez Zapatero.

El portavoz socialista sí respondió a las afirmaciones de Zaplana en el sentido de que el último comunicado de ETA demuestra la mezcla de las intenciones de la banda terrorista y la reforma estatutaria catalana.

Pérez Rubalcaba rechazó esta interpretación y se mostró convencido de que a ETA "no le interesa" la reforma catalana, aunque sí puede intentar "salir al paso" de esas lecturas emanadas, aseguró, "de un ex ministro de Interior que no daba ni una y ahora mucho menos".

"Sus intereses (de ETA) están donde están y lo demás le importa poco. Los fanáticos tienen eso, que son cortos de miras", sentenció.