Molina realizó estas declaraciones en el Pleno del Congreso de los Diputados durante el debate de totalidad de la reforma del Estatuto de Castilla-La Mancha, donde defendió que el texto es una invitación al diálogo siempre en el respeto a la Constitución Española".

El diputado del Grupo Socialista señaló que el actual modelo "responde al desarrollo de un Estado plenamente democrático y descentralizado, lo que ha permitido que Castilla-La Mancha viva un periodo máximo de prosperidad" pero quiso dejar claro que éste "ya no puede responder a los nuevos retos de la región".

En esta línea, Molina afirmó que la reforma responde al hecho de que Castilla-La Mancha "quiere alcanzar el máximo nivel de autogobierno para el progreso y desarrollo de sus gentes". Asimismo, recordó que el nuevo modelo defiende los intereses de sus ciudadanos y tiene un gran apoyo de la sociedad".

El diputado socialista señaló que el texto recoge un nuevo modelo de relaciones entre la Junta y los gobiernos locales, destina recursos a la financiación local y amplía las competencias del Gobierno regional.

En cuanto al modelo de financiación autonómica, Molina aseguró que éste "tiene que ser fruto de un acuerdo entre el Estado y las comunidades autónomas pero basado en la suficiencia económica y la corresponsabilidad fiscal". Además, exigió que la inversión en Castilla-La Mancha contemple la variable del territorio.

Finalmemte, Molina se refirió a la "caducidad" del trasvase Tajo-Segura, "que se encuentra ya al 12 por ciento de su capacidad", y señaló que, en este sentido, Castilla-La Mancha "no puede ser acusada de insolidaridad".