Con esta frase expresó el malestar del PSOE su secretario de Relaciones Institucionales y Política Autonómica, Alfonso Perales, después de que el líder del PP y otros dirigentes de esta formacióncomo Ana Botella achacaran a la política exterior española la derrota de Madrid.

Perales subrayó en rueda de prensa que la candidatura de Madrid se ha caracterizado por la solvencia, la brillantez y la unidad, y la delegación estaba presidida por la reinaSofía.

Además, agregó que esa delegación reflejaba la unidad de las instituciones españoles, al estar formada por el presidente del Gobierno, el líder de la oposición y la presidenta y el alcalde de Madrid.

Esa unidad, "que ha llenado de regocijo y de tranquilidad" a los ciudadanos, denunció Perales, "ha sido rota en horas" por las declaraciones de los dirigentes populares.

Perales denunció que nadie achacó a la política exterior española la designación de Barcelona como sede de los Juegos Olímpicos de 1992 ni de Zaragoza para la Expo de 2008.

Si Madrid hubiera sido elegida, prosiguió, el PP tampoco hubiera señalado al Gobierno central como deudor del éxito, y se hubiera limitado a felicitar a Alberto Ruiz-Gallardón "con la boca chica".

Se trata, en su opinión, de una estrategia "bronquista" por parte del PP, consistente en "disparar a todo lo que se mueve", un comportamiento de "mal cazador" que no será tolerado por los ciudadanos. Esta estrategia del PP ante el Gobierno tiene su otra cara, según Perales, en la actitud de Rajoy ante los problemas internos de su partido, con los que reacciona "como los monos de Gibraltar, ni ve ni escucha".