Afirmó que "no hay justificación razonable para mantener en su cargo a una persona que está al frente del Urbanismo,impulsando expedientes que diseñó cuando se dedicaba a hacer proyectos desde la empresa privada".

"A Porto se le está acabando el tiempo, también al consejero de Medio Ambiente, Mariano Zabía, y a Aguirre, que está amparando conductas intolerables como la de su director general de Urbanismo", añadió.

Tras resaltar que "en política, para ser decente, hay que parecerlo", dirigiéndose a la mandataria madrileña, indicó que si este alto cargo, "en su vida privada, se ha dedicado a diseñar desarrollos urbanísticos a lo largo y ancho de la comunidad es imposible que en la práctica no intervenga de manera directa en la aprobación de sus propios planes".

El portavoz del PP, Antonio Beteta, replicó, con relación a este asunto, que el PSOE "ha iniciado la caza del hombre y el chivo espiatorio se llama Porto, que ha actuado siempre con la ley en la mano".

Exigió al PSOE que, antes de denunciar, "pruebe alguna irregularidad" del director general de Urbanismo y dijo que las decisiones sobre este tipo de desarrollos las toman los ayuntamientos, que tras solicitarlo a la Comunidad de Madrid, se resuelven en la Comisión Regional de Urbanismo, "donde no vota Porto".