Alberdi, que participó con cerca de un millar de "turistas" en una fiesta campestre con la que se clausuraba el programa, aseguró que estos viajes para la tercera edad habían logrado mantener o crear "más de 20.000 puestos de trabajo", de los que más de 6.000 fueron empleos directos.

Asunts Sociales ha dedicado un presupuesto de 6.000 millones de pesetas para la puesta en práctica de este programa, partida económica que, a juicio de la ministra, "se recupra por vía indirecta".

Aseguró que la importancia de estos programas vacacionales, además de la acción social que conllevan, se debe a que "mantiene al sector turístico en temporada baja". En la campaña 93-94 han participado 143 hoteles de la geografía nacional.

La ministra anunció que la intención de su departamento era "potencia" estos programas en los próximos años, sobre todo en lo referente a las vacaciones para emigrantes en Iberoamérica, países centroueropeos o la extinta Unión Soviética.

En esta edición del programa han participado unos 3.000 emigrantes españoles mayores de 65 años residentes en Argentina, Uruguay, Venezuela y Brasil, además de un considerable contingente de los llamados "niños de la guerra" española, que de esta forman han tenido la ocasión de volver a España en vacaciones.

Para las próximas campñas, Alberdi anunció que el sistema de selección de personas mayores para estos viajes seguirá siendo "por sorteo". Además, se mostró orgullosa del alto grado de aceptación del programa vacacional.

Según el Ministerio de Asuntos Sociales, el 91,3 por ciento de los usuarios muestra un grado de satisfacción "alto o muy alto, un 6,5 lo califican de normal y sólo el 1,8 por ciento lo consideran bajo".