Los resultados de la encuesta ponen de manifiesto que los profesionales de la enfermería, con un 49%, son los que más fuman, por encima de los médicos (39%). Asímismo, en este tipo de profesionles se registra una mayor proporción de ex-fumadores, 22%, frente al 16,5% de la población general y una menor proporción de los que nunca han fumado (34%) en comparación con el resto de la población (40,5%).

Los datos de esta encuesta, que revela que fuman más los hombres que las mujeres adultas, pero que el hábito ha aumentado especialmente entre las jóvenes, fueron presentados hoy en Pamplona por María Jesús Azagra, responsable del programa de prevención del inicio del consumo de tabaco.

Con e fin de fomentar la creación de espacios libres de contaminación por consumo de tabaco en lugares públicos, el Departamento de Salud del gobierno navarro pondrá en marcha la próxima semana la campaña "Sin humo", que afectará a 1.252 centros públicos de la comunidad.

Según explicó María Jesús Azagra, el objetivo es crear áreas restringidas para fumadores en los centros sanitarios, educativos, culturales, deportivos y comerciales, de titularidad pública o privada, caracterizados porque son frecuentados or el público en general o albergan a un amplio número de trabajadores.

La campaña hace hincapié en la convivencia de fumadores y no fumadores, "con intereses contrapuestos y percepciones distintas sobre el hábito del tabaco" y postula la necesidad de encontrar en cada circunstancia concreta una solución al conflicto creado, siempre que se cumpla la normativa vigente, que prohibe el consumo de tabaco en centros docentes a menores de 16 años, así como en centros y servicios sanitarios, en zonas de atenión al público, en salas de lectura, exposiciones y espectáculos, locales comerciales cerrados, en lugares donde trabajan mujeres embarazadas y en centros industriales con contaminantes.

El tabaquismo es responsable de más de 600 muertes anuales en Navarra y la prevención y atención de las dolencias derivadas de este hábito generan un coste económico de 6.610 millones de pesetas al año, lo que representa el 16,8% del gasto sanitario total de la comunidad.