Verdier destacó de la campaña que está a punto de concluir la conflictividad que se ha vivido por los ataques de agricultores franceses a camiones españoles cargados con este fruto, así como la incidencia de la sequía en las plantaciones.

"Estos factores, unidos a otros problemas, provocarán que muy posiblemente el próximo año tengamos una menor superficie plantada y por tanto una menor producción", agregó.

El gerente de Freshulva, organización que engloba al 90 por ciento de los productores onubenses de fresa, expresó su preocupación ante la posibilidad de que puedan existir contrapartidas agrícolas en la negociación del nuevo tratado de pesca entre la Unión Europea y Marruecos y que afecten a la fresa.

La campaña fresera no tiene fecha fija de finalización, por lo que aunque en algunas explotaciones ya ha terminado la recogida, en otras se sigue trabajando durante estos días.