El ex ministro, que participó en un encuentro con periodistas en Madrid organizado por el Club Diálogos para la Democracia, reiteró su convencimiento de que el principal propósito de las privatizaciones "es hacer caja", puesto que, en su opinión, no servirán para aumentar la eficacia de esas empresas.

Eguiagaray insistió en el poco calado de las medidas tomadas y añadió al respecto que "no se puede confundir la venta de Repsol con la desamortización de Mendizábal". También recomendó que nose usen los ingresos obtenidos para mejorar los datos sobre el déficit público, porque "si hacemos trampas, las pagaremos en la Unión Económica y Monetaria".

El representante del PSOE criticó el hecho de que Téneo y la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (Sepi) se vayan a fusionar, ya que esto supone "la recreación del INI".

De esta forma, se volverían a mezclar los intereses de empresas eminentemente industriales con otras cuya única justificación para estar en manos del Estado es l posesión de participaciones en su capital.

RECURSO DE INCONSTITUCIONALIDAD

El ex titular de Industria señaló que, después de "las primeras semanas de inactividad", el Gobierno ha pasado a una fase de "hiperexcitación e hiperactividad" que le ha llevado a tomar decisiones no por la vía parlamentaria, sino por la urgente de los decretos-ley.

Eguiagaray explicó que el recurso de insconstitucionalidad que el PSOE va a emprender contra las medidas del plan de choque se basa, precisamente, en que lo cambios en la fiscalidad de las plusvalías modifican la estructura impositiva del IRPF. Según él, cambios de tal calado no pueden ejecutarse mediante decretos-ley, sino mediante procedimientos ordinarios.

Explicó que ahora las plusvalías tienen una tributación única y proporcional, "ajena a la progresividad del resto del IRPF", con lo que en realidad "se ha perpretado la voladura de este impuesto". Calculó que el plan de choque tendrá un coste fiscal de 300.000 millones de pesetas durante varios ejericios.

El portavoz socialista afirmó que "es absolutamente falso" que el plan de choque vaya a tener un efecto reactivador de la economía. En cuanto a las medidas liberalizadoras, expuso que las relativas a suelo, colegios profesionales y energía no serán tales, porque "están mal hechas".