Según explicaron a Servimedia fuentes del centro penitenciario, en el último mes se han registrado tres muertes -dos hombres y una mujer- relacionadas con el consumo de estupefacientes que habían sido introducidos ilegalmente. El último caso se produjo el pasado domingo, según confirmaron las citdas fuentes.

La prisión Jaén-2 está considera como de alta seguridad y, desde su apertura, se desarrollan en ella diversos programas para erradicar el consumo de drogas, así como para evitar su introducción. No obstante, un portavoz del colectivo de funcionarios declaró a Servimedia que a pesar de todo, "el control es bastante difícil".

Por otra parte, el Comisionado para la Droga de la Junta de Andalucía ha decidido abrir una investigación sobre este asunto. Fuentes del citado organismo calificaon de "graves" los sucesos ocurridos.