EL PRINCIPE DE ASTURIAS ALMORZO EN EL CONGRESO MIÑONCITOS DE BOGAVANTE Y SUPREMA DE LUBINA

MADRID
SERVIMEDIA

El príncipe de Asturias y los miembros de la Mesa del Congreso y de la Junta de Portavoces degustaron esta tarde un menú que consistió en miñoncitos de bogavante sobre echo de hierbas y una suprema de lubina dorada al horno en salsa de santiaguiños y almejas.

Los comensales tomaron de postre un melón de cantalupo relleno de frutos del bosque, café y bombones. Los platos fueron regados con vinos Fransola de Torres y Castillo de Ygay Gran Reserva del 87. También fue servido cava Gran Juve y Camps.

La comida ofrecida en honor de Felipe de Borbón fue el colofón a la visita institucional que realizó el príncipe de Asturias al Congreso para conocer en detalle las difrentes actividades parlamentarias de la Cámara.

El heredero de la Corona, que vestía una traje gris con rayas muy finas y una camisa azul con corbata de igual color, asistió a sendas reuniones de la Mesa y Junta de Portavoces, y durante ellas tomó buena nota de las explicaciones y planteó algunas preguntas.

Durante su visita se produjeron algunas anécdotas, como la de la portavoz del Grupo Mixto, la parlamentaria republicana catalana Pilar Rahola, quien no le llamó ciudadano -tratamiento que sí h utilizado en alguna ocasión con el Rey Juan Carlos- y que aprovechó la ocasión para explicar al príncipe su ideología política tan alejada de la institución monárquica.

José María Chiquillo, diputado de Unión Valenciana (UV) adscrito también al Grupo Mixto, acudió presto al quite para explicar al príncipe que en el Grupo Mixto existen otras formaciones como la suya que no comparten los postulados de la diputada Rahola.

OBSEQUIO

Tras finalizar sus encuentros con la Mesa y Junta de Portavoces, e presidente de la Cámara, Federico Trillo, le obsequió una figura con un león, en cuya peana figuraba una placa conmemorativa de su visita.

Posteriormente, el heredero de la Corona fue invitado a una copa de vino ofrecida en el Salón de los Pasos Perdidos y a la que asistieron diputados, funcionarios y periodistas.

En un corrillo con los informadores, Felipe de Borbón se mostró interesado en conocer el quehacer diario de los cronistas parlamentarios y les preguntó si podían reflejar ante la opinin pública todo el trabajo que realizan los diputados. El príncipe, en un gesto amable, accedió también a fotografiarse junto a un grupo de ellos, que así se lo habían solicitado.

Felipe de Borbón, que estaba acompañado en todo momento del presidente del Congreso, pudo escuchar algún comentario irónico que los informadores hicieron a Trillo, a propósito del expresivo comentario de "¡manda huevos!" que el presidente de la Cámara deslizó recientemente durante una votación en pleno.

Trillo no está moesto por la repercusión que tuvo su desafortunada frase y ha reconocido que, a veces, el lenguaje parlamentario está muy alejado de la forma en que habla la mayoría de los ciudadanos.

(SERVIMEDIA)
22 Abr 1997
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