Asimismo, Carranza, para quien el mes de cárcel que ha cumplido ha sido "dur", anunció que piensa recurrir a título individual una serie de artículos de la ley que conducen a "la desigualdad, la discriminación de sexo y a perder el derecho al trabajo". Para ello, Carranza tiene pensado solicitar el amparo del Tribunal Constitucional.

A la salida de la prisión se encontraban unas 300 personas, pertenecientes la mayoría de ellos a la Asociación de Padres de Familia Separados (APFS), a la que pertenece José María Carranza.

La APFS ha venido celebrando manifestaciones periódcas frente al Ministerio de Justicia e Interior desde que Carranza entró en la cárcel, para pedir la liberación de éste y exigir un trato más igualitario en las separaciones.

El presidente de la APFS, Juan Luis Rubio, ha reclamado asimismo la creación de un "instituto de la familia" y ha pedido "igualdad entre el hombre y la mujer". Rubio ha criticado además a la ministra de Asuntos Sociales, Cristina Alberdi, ya que "concede todas las subvenciones a asociaciones de mujeres y es claramente sectaria". Asimismo, la APFS denunció a principios de agosto la actuación del ministro de Justicia e Interior, Juan Alberto Belloch, que, según Juan Luis Rubio, retiró "personalmente" del proyecto de Código Penal que en este momento se tramita en el Congreso de los Diputados un artículo que penalizaba el incumplimiento de visitas.

Según las cartas recibidas por la APFS, el ministro Belloch responsabilizó de la retirada del citado artículo a los partidos de la oposición. Sin embargo, según declaró Rubio, en ls consultas que realizó la APFS constataron que "el ministro nos mintió inculpando a los otros partidos".