En un comunicado, UGT apunta que los principales perjudicados de estos presupuestos serán, "nuevamente", los trabajadores, en especial los empleados públicos y los perceptores del salario mínimo interprofesional, cuyo salario crecerá, un año más, un 2%, por debajo de la inflación real.

UGT critica que la prioridad absoluta del Gobierno sea l equilibrio presupuestario, aunque lograrlo suponga un deterioro de la actividad económica, del empleo y un mayor déficit social. Frente a esta opción, UGT reclama "más gasto" en políticas activas de empleo, protección social, infraestructuras e I+D.