El MOPTMA ha decidido dar prioridad a este aspecto, a pesar que la inversión en carreteras se ha reducido para el próximo año, pasando de los 392.000 millones de 1995 a los 370.000 millones para 1996. El Ministerio justificó su decisión porque la red nacional de carreteras, integrada por 20.000 kilómetros, tiene un valor de reposición de cuatro billones de pesetas.

La mayor partida de este apartado destinado a la conservación de las carrteras se dedicaría a "seguridad vial", que recibiría 45.500 millones (frente a los 35.000 millones de este año), de los cuales 25.000 millones serán empleados en conservación de señales, pasos a nivel e iluminación.

Otros 7.050 millones de pesetas se dedicarán a refuerzo de firmes, si bien esta partida sufre un descenso en 47 millones sobre el año pasado. También disminuye la reposición de antiguas vías, que pasa de 10.760 a 2.140 millones, ya que sólo continuará una obra ya empezada y no comenzará niguna nueva.

Por su parte, 4.500 millones serán empleados en señalización, con 12.000 nuevas señales verticales y 10.000 kilómetros afectados. El Ministerio de Obras Públicas ha destinado 950 millones de pesetas, la misma cantidad que este año, para el mantenimiento y mejora de su parque de maquinaria. En este sentido, tiene previsto adquirir 150 nuevas unidades.