Después de que el proyecto del Ejecutivo superara el primer paso de su tramitación parlamentaria, Aznar dejó ver su satisfacción en los pasillos del Congreso, al afirmar que España entra con estas cuentas en el equilibrio presupuestario.

Ese equilibrio, recordó, permitirá a España desarrollar un crecimiento sostenido que genere empleo "y que nos pueda llevar, en un plazo breve, al año próximo, a una nueva baja de impuestos", que conduzca, a su vez, a un aumento d la prosperidad de los ciudadanos.

Al ser preguntado por la influencia que la crisis del petróleo puede tener sobre estos presupuestos, Aznar recordó que la economía española tiene una perspectiva de crecimiento del 3,6 por ciento del próximo año, y de creación de 400.000 empleos.

Aunque reconoció la necesidad de afrontar esa crisis, el presidente del Gobierno consideró que el saneamiento de la economía española, el superávit de la Seguridad Social y el equilibrio presupuestario "nos permite tene margen suficiente" de maniobra para paliarla y mantener el crecimiento.