En declaraciones en los pasillos del Congreso, Mayor reconoció que estas diferencias han sido "importantes y significativas", pero insistió en que lo importante ahora es "seguir trabajando juntos" en la normalización de la situación en el País Vasco y en favor de la buena marcha de la Mesa de Ajuria Enea.

Igualmente, el titular de la cartera de Interior señaló que las discrepancia entre populares y nacionalistas vascos van más allá del acuerdo de investidura suscrito por ambas formaciones, que, a su modo de ver, seguirá respetándose.

Preguntado sobre si la Mesa de Ajuria Enea debe tomar las decisiones por mayoría y no por unanimidad, Mayor se mostró muy cauto y respetuoso al afirmar que quienes deciden el futuro son los integrantes de esa Mesa y no el ministro del Interior.

"Hay un 'lehenkadari'", añadió, "a quien corresponde liderar la Mesa, y hay partidos políticos con epresentación en el País Vasco, que son los que tienen que llevar las sugerencias y las iniciativas en tal sentido".

Mayor garantizó que el Gobierno no interferirá en las decisiones que pueda adoptar la Mesa de Ajuria Enea, de la que dijo que tiene que ser un instrumento de normalidad en el País Vasco y no de "fractura o división".