En un desayuno con Servimedia, Barrero insistió en que aplicará el Reglamento de la cámara de la forma más "flexible" posible para el uso de lenguas, pero sin salirse de los preceptos legales. "Dentro de lo que el Reglamento permita", añadió, "yo daré todas las facilidades posibles".

Por otro lado, el mandatario popular dejó claro su compromiso para revitaliar el Senado y destarrar de la opinión pública la imagen de que es una Cámara devaluada, "en la que parece que todo el mundo está con las manos en los bolsillos, sin hacer nada".

El sustituto de Juan José Laborda al frente de la Cámara Alta expresó su deseo de impulsar la reforma constitucional emprendida en la pasada legislatura para culminar el proceso que convierta a esta institución en un auténtico foro de representación territorial.

Para la consecución de este objetivo, cree que no bastará úicamente con na reforma reglamentaria, sino que será necesario emprender una reforma de la Carta Magna que podría afectar al título octavo, relativo a la organización territorial del Estado, y cuya finalidad sería la profundización del Estado de las autonomías.

Durante la entrevista, el presidente del Senado aludió a las negociaciones entre el PP y las formaciones nacionalistas y admitió que algunas comunidades al margen de esas conversaciones pueden guardar cierto recelo respecto al contenido de los uturos pactos.

NO HAY CONFLICTO CON FRAGA

Sin embargo, aseguró que José María Aznar defiende un proyecto nacional basado en la solidaridad y el respeto a las comunidades y que al final de las negociaciones todas las regiones, incluidas las más desfavorecidas, quedarán satisfechas con los acuerdos y con el sistema de financiación que surja de estas reuniones.

Barrero, que próximamente renunciará a su escaño de la Asamblea de Extremadura aunque conservará su cargo de presidente del PP regional, mnifestó que uno de sus principales deseos como presidente del Senado es la celebración de una conferencia de presidentes autonómicos a finales del presente año o a comienzos del siguiente.

Tras calificar de "impecable" el traspaso de poderes realizado por Laborda, Barrero se cuidó de manifestar que no tiene discrepancias con Manuel Fraga respecto a sus propuestas de federalismo.

En su opinión, el veterano dirigente popular "puso sobre el tapete" un asunto que está en el ánimo político de mucha gete, pero que necesita una maduración política y social y que es inviable en los momentos actuales.

Respecto al propósito del presidente del Congreso, Federico Trillo, de elevar los emolumentos de los diputados, Barrero explicó que los salarios deben fijarse en función del trabajo que realizan. "Hay que intentar que los parlamentarios tengan definidas claramente sus responsabilidade, que trabajen y se dediquen a sus ocupaciones políticas y, en función de eso, establecer las compensaciones económicas lóicas y justas".

Por otra parte, Barrero rechazó la posibilidad de que se reabra una nueva "comisión GAL" en el Senado y señaló que en estos momentos tiene que actuar la justicia, haciéndolo con la "dureza" necesaria para esclarecer lo que ha ocurrido.