Castro admitió que la Plataforma Sindical está en su derecho de convocar la huelga, con independencia de los perjucios que la medida ocasione a los madrileños, aunque destacó que en una situacón tan tensa como la que atraviesan el comité de empresa y la dirección de la EMT los despidos decididos por la compañía no han ayudado a la reconciliación de ambas partes.

El responsable de la federación vecinal subrayó, no obstante, que los empleados de la EMT deberían respetar los servicios mínimos fijados por el Consorcio Regional de Transportes, sobre todo en aquellas zonas urbanas en las que no llega la red del Metro.

En cuanto a una posible solución del conflicto, Castro se mostró pesimist y recordó que ayer habló con el concejal de Circulación, José Antonio García Alarilla, quien le insistió en que la única responsabilidad de la convocatoria de huelga es de la Plataforma Sindical.

Castro adelantó que el próximo miércoles la junta directiva de la FRAVM celebrará una reunión en la que analizará la situación creada como consecuencia de la huelga convocada en la EMT.