EL PRESIDENTE DE CAMPSA DICE QUE EL OPTIMISMO NO DEBE HACERNOS OLVIDAR LAS ESCASAS RESERVAS DE OCCIDENTE
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El presidente de Campsa, José Luis Díaz Fernández, aseguró hoy que la existencia de una reservas de crudo para cerca de 100 años en zonas de producción como Oriente Próximo, "no debe hacernos olvidar que en otras áreas occidentales oscilan entre los 10 y los 15 años, ircunstancia que puede llegar a ser dramática".
No obstante, Díaz Fernandez, que participó en un coloquio sobre "La guerra del Golfo y el petróleo", aseguró que no hay motivos para el alarmismo, y se mostró convencido de que los precios de las gasolinas en España permanecerán en torno a los niveles actuales durante los próximos meses.
Añadió que en los últimos meses se ha producido un acopio de derivados del crudo, fundamentalmente gas oíl, que ha motivado un comportamiento al alza en los preciosde estos productos.
Tambien asisitieron al coloquio, organizado por el Club Español del Petróleo, el embajador de Venezuela en España y expresidente de la OPEP, Arturo Hernández Grisanti, el director de Economía de CEOE, José Folgado, el consejero delegado de Cepsa, Eugenio Marín, y el presidente de Repsol Petróleo, Juan Sancho Rof.
Para el embajador venezolano, el conflicto del Golfo está provocando un consumo de reservas de crudo que exigirá unas inversiones medias de 20.000 millones de dólarespor productor para volver a cubrirlas. "Esta financiación requirirá un precio del barril en trono a los 20 dólares cuando acabe el conflicto", recalcó.
A su juicio, la decisión de la Agencia Internacional de la Energía (AIE) de liberar unas reservas de 2 millones de barriles de crudo de los países industrializados, "es algo que puede perturbar el mercado y no había motivo para ello".
Por su parte, José Folgado dijo que el conflicto aún no ha influido sensiblemente en la economía española, y añadi que "si la guerra es corta, mejorarán las espectativas internacionales y se podrán desbloquear algunas inversiones que ahora están paralizadas".
DOS INTERROGANTES
Para el dirigente de CEOE, los dos principales interrogantes de la actual situación es la actitud que adopten los países del Magreb respecto al conflicto, y si la política económica del Gobierno "será capaz de acabar con los actuales desequilibrios".
Sobre los efectos económicos de la guerra, Juan Sancho Rof explicó que "la invasión e Kuwait se produjo en un momento inoportuno para la economía occidental, ya que se estaba planificandose energéticamente para la próxima década. Esto exige unas inversiones que no puede afrontarse en un marco de inestabilidad".
El consejero delegado de Cepsa, Eugenio Marín, destacó que esta crisis del petróleo se parece a las anteriores en que estalló con unos precios del crudo bajos. Sin embargo, añadió, los precios no han modificado sus tendencias, como ocurrió en 1979, y han mantenido una actitud utónoma de la incertidumbre de los mercados.
(SERVIMEDIA)
13 Feb 1991