Pepe Rodríguez explicó que "el niño es un objeto sin opinión, que se encuentra completamente desprotegido", e insistió en la necesidad de responsabilizar a los adultos en la tarea de la educación.

Asimismo, destacó que la mayoría de los niños que sufren malos tratos físicos o psíquicos desarrollan posteriormente una personalidad introvertida que repercute en u vida.

Por su parte, el diputado Juan María Bandrés, que también asistió a la presentación de la obra, señaló que es "un excelente libro que expresa una realidad muy cruda, una dura realidad que no se llegará a conocer nunca".

Bandrés subrayó que Pepe Rodríguez "ha hecho un gran servicio ala verdad y a la justicia con este libro", para añadir que es necesario que la sociedad luche contra la violencia y la explotación que sufre la población infantil.

Victoria Camps, senadora y catedrática e Etica, señaló que uno de los aspectos más preocupantes que recoge el libro de Rodríguez es la abdicación de la educación por parte de los mayores. "Hoy nadie se hace responsable de la educación de forma clara, lo que da lugar a una permisividad excesiva, muestra de una educación deficiente y carente de contenido", afirmó.