En un comunicado, los prácticos portuarios afirmaron que la nueva normativa contradice la decisión del Parlamento Europeo de excluir a este colectivo de la nueva Ley de Prestación de Servicios Portuarios, por considerar que Bruselas "respeta la verdadera naturaleza jurídica de este servicio, que no es otra que la seguridad". Así, este colectivo profesional, que presta servicio de asesoramiento a los capitanes en la entrada y salida de puerto de los buques, destacó que el texto de la ley, por la que se abrirá a la competencia la prestación de servicios portuarios, "modificará sustancialmente" el actual modelo del practicaje en Europa que, según recordó, "está catalogado como servicio de interés público y, por tanto, excluido de las reglas de mercado por razones de seguridad".

Finalmente, los prácticos portuarios defendiron que someter el practicaje a criterios comerciales "conlleva una notable pérdida de la calidad de un servicio fundamental para la seguridad en la navegación en su punto más congestionado y conflictivo, el puerto".

"La iniciativa del Ejecutivo da vía libre al naviero para prescindir del servicios de carga y descarga si estima que puede ofrecérselo a sí mismo o bien contratarlo a un tercero que realice trabajos tecnico-naúticos integrados", concluyeron.