“La mayoría absoluta del Senado rechaza la indigna ley de Sánchez que pretende perdonar penas a etarras. Esto supone que el Congreso tenga que votarla de nuevo: el PSOE tendrá que elegir entre los verdugos o sus víctimas. Nosotros lo tenemos claro, siempre con las víctimas", escribió la secretaria general del PP, Cuca Gamarra, en sus redes sociales.

Todo ello, después que el Senado acordara devolver al Congreso la ley de aplicación de antecedentes penales en la UE, al interpretar que el voto contrario a esta norma supone que ha sido vetada. Este movimiento se fundamenta en un informe de la secretaría general del Senado, que, en base al artículo 90.2 de la Constitución y a los artículos 106.1 y 122 del Reglamento del Senado, considera que el rechazo mayoritario de la Cámara supone, de facto, un veto sobre el que tiene que decidir el Congreso de los Diputados.

Hasta la fecha, la interpretación general era que, al no haber presentado ninguna enmienda o veto, la reforma judicial estaba destinada a publicarse en el BOE independientemente de la posición de la Cámara Alta. El PP había inadvertido los efectos de la modificación de la ley orgánica 7/2014 y había allanado el camino para su aprobación.

Tras darse cuenta de su “error injustificable”, la oposición anunció el pasado lunes que tomaría todas las medidas en su mano para enmendarlo. La primera fue aplazar la votación de la reforma para retrasar su aprobación definitiva. Y ahora, una semana después, los letrados del Senado hacen una interpretación del Reglamento que permite a la Presidencia de la Cámara Alta devolver la ley al Congreso, donde el PP reta al PSOE a cambiar su postura.

INTERPELACIÓN A DIPUTADOS DEL PSOE

“Sánchez pretende gobernar de espaldas al Parlamento, y eso nos conduce a situaciones inéditas en nuestra democracia. El presidente del Gobierno pretendió estafar al Congreso y al Senado, y lo que ha hecho la Cámara Alta es, simple y llanamente, ejercer sus competencias”, explicaron fuentes del PP en el Senado.

“No hay precedentes de un rechazo por mayoría absoluta a un proyecto de ley que no haya sido enmendado en Comisión. Por ello, en base al artículo 90.2 de la Constitución y a los artículos 106.1 y 122 del Reglamento del Senado, la Cámara Alta considera esta votación como un veto del Senado sobre el que tiene que decidir el Congreso de los Diputados”, añadieron.

Desde el grupo parlamentario consideran que esta decisión “refuerza los pilares de nuestra democracia y el sistema bicameral recogido en la Constitución Española y desarrollado por el Tribunal Constitucional”. “A partir de ahora”, prosiguieron las mismas fuentes, “se abre un nuevo escenario en el que el Gobierno y los diputados del PSOE tienen una nueva oportunidad para defender a las víctimas del terrorismo, que es el único objetivo que mueve al PP: la memoria, la dignidad y la justicia de todas ellas”.

“No hay ataque ni insulto del PSOE que tape la pregunta a la que tienen que responder ahora todos y cada uno de sus diputados: ¿Apoyarán el veto del Senado y se situarán cerca de las víctimas, o prefieren beneficiar a sus verdugos a cambio del apoyo de Bildu?”, concluyeron.