El PP,que aceptó la mitad de las enmiendas de IU y ninguna del PSM, actuó en consonancia con el acuerdo político logrado recientemente con IU para garantizar la estabilidad en Caja Madrid.

El diputado del PP Pedro Muñoz Abrines dijo que este proyecto de ley "merece ser aprobado por todos" y pidió al PSM que se sume al citado acuerdo, "si no quiere quedarse fuera de todo, como hizo en 2003".

El PP aceptó tres de las ocho enmiendas de IU y accedió a sustituir una suya (sobre la retroactividad de la ley) por el texto que propuso Reneses.

Entre las aceptadas, una que supone que los miembros de la Comisión de Control de Caja Madrid que quieran solicitar un crédito a la entidad tendrán que pedir autorización a la Comunidad de Madrid, como órgano de tutela, como sucede con los vocales del Consejo de Administración. Esta propuesta contó con el apoyo del PSM.

Otra de las enmiendas de IU aceptada por el PP establece que los consejeros generales correspondientes a cada entidad representativa "serán elegidos por estas entidades en el número máximo que se establezca para cada una de ellas y de entre personas de reconocido prestigio o experiencia en las materias relacionadas con la actividad de la Caja".

Socialistas e IU rechazaron la creación de diecisiete circunscripciones (una por cada comunidad autónoma) para elegir a los consejeros del sector de impositores y apoyaron el mantenimiento de las dos circunscripciones tradicionales, la primera de la Comunidad de Madrid y la segunda, del resto de comunidades.

El diputado socialista Adolfo Piñedo explicó que le gustaría llegar un "consenso" sobre la Ley y que Caja Madrid estuviera "fuera del debate partidario" y propuso "buscar la gestión profesional de la Caja, normalizar el crédito a las familias y las empresas, no sólo al Real Madrid y contribuir positivamente a la inevitable reestructuración del sector de las cajas y el sector financiero".