En una rueda de prensa en el Congreso, Cisneros dijo que las declaraciones del portavoz socialista, Jesús Caldera, son "tan extraordinariamente güeras, tan extraordinariamente vacías, y tan carentes de cualquier novedad" que no merecen explicación.

Aseguró que no recuerda "tal ejercicio de trivialización de la vida parlamentaria y de banalización de una institución como la Diputación Permanente como la que estamos asistiendo este vrano".

Explicó que éste es un órgano sustitutorio del ejercicio de control que corresponde al Pleno en periodos de vacación parlamentaria, para "hechos de extraordinaria relevancia, sobrevenidos, es decir, impuestos por la actualidad".

Apuntó que desarrollar dos reuniones sucesivas con prácticamente el mismo orden del día, y que ahora se pida otra incluyendo el "Prestige", un suceso de noviembre del año pasado, "es realmente peregrino", por lo que el PP está preocupado "por la situación de extrem fragilidad y de insuficiencia" del PSOE.