En declaraciones en el Congreso de los Diputados, Martínez-Pujalte mostró su máximo respeto a las decisiones que se toman en el seno de las empresas y, por tanto, a que Sacyr diera marcha atrás en su intento de adquirir una participación significativa en BBVA. No obstante, aclaró que si la decisión hubiera sido la contraria también la respetarían.

El diputado del PP explicó que su crítica no es hacia la decisión empresarial, cualquiera que sea, sino a la intromisión gubernamental en operaciones de empresas privadas.

Insistió en que el PP denunció desde el principo la intromisión en la operación de La Moncloa, "del asesor del señor Zapatero", Miguel Sebastián, la "del señor Solbes con sus declaraciones antes del Consejo de Administración de Sacyr-Vallehermoso" y la "del Gobierno en bloque", con el único objetivo de "tomar al asalto" una empresa privada.

A su juicio, el Ejecutivo está interviniendo en el sector privado y "lo que nos parece mal es que el Gobierno esté aprovechándose de los mecanismos de poder para dar las empresas a sus amigos".